¿Son culpables los alumnos de lo que les pasa cuando
son víctimas de Bullying y
Ciberbullying?
El Bullying o acoso escolar se da cuando un alumno se encuentra expuesto, de forma reiterada y prolongada en el tiempo, a acciones negativas por parte de uno o varios compañeros. (Olweus, 1983).
El ciberbullying podemos considerarlo como una nueva forma de Bullying, donde se hace uso de los medios tecnológicos para acosar, molestar o maltratar a la victima que no puede defenderse. (Smith, 2006).
Desde una
perspectiva evolucionista, el mantenimiento de la proximidad a las figuras de
apego es un mecanismo central que promueve la supervivencia del infante.
Durante la infancia temprana, así como en la edad adulta, el apego se
identifica con un interés insistente en mantener proximidad, aún bajo
situaciones no estresantes, con una o pocas personas seleccionadas.
Actualmente se
reconocen cuatro tipos de apego, los cuales se exponemos a favor de que las
victimas de bullying y ciberbullying no son culpables de la agresión que
sufren:
El apego seguro: El niño
aprende a regular efectivamente sus emociones, son evaluados con menos
problemas sociales, mayor autoestima, son auto confiados. No victimizan a otros
ni son victimizados.
El apego inseguro evitativo: Los infantes suelen ser hostiles y mostrar comportamiento agresivo no provocado. Los niños sobre regulan su afecto. No suelen establecer relaciones con otros niños y muestran apatía. Son generalmente victimarios.
En el apego inseguro ambivalente/resistente: Los infantes sobre- regulan su afecto, incrementando su expresión de malestar. Son incapaces de mantener relaciones con los pares y a veces son presa fácil de la agresión de los infantes evitativos.
En el apego desorganizado/desorientado, los niños presentan un despliegue de conductas no dirigidas hacia un fin, desorganizadas y desorientadas, combinan características y modos de comportamiento contradictorios. presentan un comportamiento frió y sin sentido. Son niños maltratados.
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